Durante la tarde de este domingo, medios internacionales han confirmado la destrucción del avión Antonov An-225, conocido en Ucrania como "Mriya" (Sueño), el cual ostentaba el título como la aeronave más grande y pesada en el mundo, pero además, contaba con características que lo hacían único. Conoce más sobre esta sorprendente aeronave y su historia.
Por medio de un comunicado, el presidente de Ucrania, Vladimir Zelenski, confirmó la destrucción del avión Antonov An-225, en medio de los bombardeos que tienen lugar por parte de Rusia cerca de la ciudad de Kiev, donde no fue posible que la nave despegara debido a que estaba siendo sometida a reparaciones.
¿Qué hacía especial al "Mriya"?
La aeronave contaba con una longitud total de 84 metros y un peso de 640 toneladas, fungiendo como avión de transporte diseñado durante la década de 1980.
Originalmente, el enorme avión fue ideado para transportar el transbordador espacial Burán, así como a los cohetes del programa espacial soviético.
No obstante, debido a sus dimensiones, también enfrentó algunas dificultades al entrar en funcionamiento, siendo necesario añadirle extensiones al fuselaje de sus alas, así como dos motores turbofan, sumando un total de seis. Contaba además con 36 ruedas en su tren de aterrizaje.
Debido a estas características, al momento del despegue se creaba una perturbación en el aire, siendo requerida una pista de larga longitud para su operación.
En todo el mundo, solamente el 35% de los aeropuertos tienen la capacidad para recibir a un avión como este. Además, sus costos de operación rondaban el millón de dólares al año, lo que suponía toda una hazaña para que el Antonov 225 desempeñara sus funciones.
El triste final del avión más grande del mundo
El 27 de febrero del 2022, autoridades ucranianas confirmaron que el avión fue destruido debido a un ataque aéreo ruso, en medio de la escalada del conflicto entre ambas naciones. Fue imposible que levantara el vuelo, debido a que estaba siendo reparado.
No obstante, no todo está perdido, ya que debido al amor de los ucranianos por este "sueño hecho realidad", han confirmado una posible reconstrucción, la cual costaría más de tres mil millones de dólares y podría tomar hasta cinco años en ser finalizada.