¿Te has despertado alguna vez a las 03:33 con una sensación de miedo o presenciado actividad paranormal?
Durante la llamada hora del diablo, no son pocos los casos de personas que indican que han participado de alguna manifestación, y los archivos de los parapsicólogos se encuentran plagados de casos en los que los hechos registrados han ocurrido a esta precisa hora, lo que ha dado origen a debates y especulaciones no solo en el área de lo paranormal, sino también en la científica.
Te puede interesar: El zombi del Cementerio de Dolores
Expertos en temas paranormales no se ponen de acuerdo en cuanto al por qué esta hora precisamente pareciera la favorita de los demonios, fantasmas o brujas para hacer de las suyas.
Los numerólogos, por ejemplo, explican que este fenómeno tiene que ver con la hora y edad en que Jesús murió crucificado, es decir, a las tres de la tarde y a los 33 años.
Los defensores de esta teoría, indican que se trata de una tergiversación a manera de burla que el demonio lleva a cabo para mofarse e imitar lo que podría ser tomado como un símbolo sagrado.
Otros numerólogos, sin embargo, afirman que esta hora es la predilecta por el diablo debido a que se trata de la mitad del 666, el número de la bestia, según el libro del apocalipsis.
Asimismo, una hipótesis sugiere que la ausencia de luz a estas horas de la madrugada hace que los sentidos se agudicen, lo cual facilitaría la percepción de presencias de otros planos astrales.
También se afirma que a las 3:33 el mundo de los vivos entra en contacto con el de los muertos, lo que permite que espíritus y demonios pasen libremente y se comuniquen con los vivos con más facilidad.
¿Qué dice la ciencia respecto a la “hora del diablo”?
Como suele pasar, existe la contraparte científica, que trata de dar una explicación racional a este tipo de fenómenos.
Por su parte, el pensamiento científico expone varias teorías en torno al asunto, las más aceptadas giran en torno a los ritmos circadianos, la baja natural de defensas que ocurre durante las madrugadas y una mayor predisposición al miedo debido a la oscuridad.
La teoría de los ritmos circadianos y la baja de defensas señala que el cuerpo humano obedece a un reloj natural y sus reacciones fisiológicas están siempre ligadas a un horario.
Por este motivo las defensas del cuerpo bajan durante la madrugada, quedando más vulnerable a organismos patógenos, lo que explicaría además el por qué las muertes naturales son más comunes a esa hora.
A estas explicaciones, se agrega la parálisis del sueño, que es un bloqueo que el cerebro hace del cuerpo para evitar que las personas se hagan daño a sí mismas cuando duermen. Sin embargo, en ocasiones este sigue aún cuando la persona ya está despierta, lo que genera la imposibilidad de moverse y un sentimiento de opresión en el pecho.