En algunos países asiáticos, como Japón, es normal observar algunos reality shows un tanto peculiares, que se diferencian de los que suelen verse en otros países, y es justo por ello, que hay quienes, más allá de verlos entretenidos y divertidos, los califican como bizarros y hasta perturbadores.
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Tal es el caso del programa Susunu! Denpa Shōnen, un reality show japonés que se transmitió por la cadena Nippon TV, desde inicios de 1998 y duró al aire cerca de cuatro años, puesto que en septiembre del 2002, fue cancelado por órdenes del gobierno, debido a que era señalado por presuntamente torturar a sus concursantes.
Pese a que varias personas participaron en este programa de telerrealidad, hubo uno que se volvió sumamente popular debido a todo lo que tuvo que pasar durante el reality, su nombre es Tomoaki Hamatsu, mejor conocido como Nasubi, y acá te contamos más sobre él y su aparición en el proyecto.
¿Cómo era el reality show japonés que fue acusado de torturar a sus concursantes?
Pese a haber sido creado y proyectado en Japón inicialmente, con el paso del tiempo, el programa Susunu! Denpa Shōnen ha alcanzado gran notoriedad a nivel internacional, debido a la manera en que trataban a los concursantes y las malas condiciones en las que terminaban, con problemas psicológicos, desnutrición, deshidratación, entre otros.
En ese momento Tomoaki Hamatsu, quien era un comediante reconocido en aquel país, con apenas 22 años, se apuntó para entrar a un sorteo en el que las personas participaban para ser parte del programa. Luego de esperar un tiempo, le avisaron que él había sido el elegido, por lo que fue trasladado hasta el lugar del concurso con los ojos vendados.
Pero, ¿en qué consistía el programa? el reality Susunu! Denpa Shōnen trataba de mantener a sus concursantes aislados de la sociedad, pudiendo interactuar únicamente con miembros de la producción del programa, mientras todo esto era televisado en vivo.
Además, Tomoaki Hamatsu, tenía que estar encerrado en una pequeña habitación, donde tenía servicios básicos para sobrevivir, y algunas revistas. Asimismo, la producción ordenó al participante que, mientras estuviera encerrado, tendría que estar totalmente desnudo.
Debido a que, como ya mencionamos anteriormente, el programa era televisado, utilizaron un tipo de emoji de berenjena para tapar sus partes íntimas, lo que le dio nombre a su pseudónimo “Nasubi”, una palabra japonesa que traducida al español significa “berenjena”.
Nasubi duró casi un año en estas condiciones, buscando ganar 1 millón de yenes
La recompensa por ganar este reality show sería de 1 millón de yenes, que en pesos mexicanos serían alrededor de 130 mil 536 pesos, un premio bastante pequeño para todo lo que tuvo que enfrentar.
Durante los 335 días que estuvo encerrado, es decir, casi un año entero, Nasubi tuvo que participar en sorteos que se encontraban dentro de las revistas que tenía en su habitación, donde en su mayoría, los premios eran alimentos, que lo ayudarían a nutrirse durante su estancia en esa habitación.
Debido a que no siempre ganaba, su dieta consistía en básicamente beber agua, por lo que bajó de peso drásticamente, además de que, cuando llegaba a comer, gracias a alguno de los premios que sacaba en los sorteos que aparecían en las revistas, se alimentaba con bolsas de arroz crudo, sobres de azúcar y hasta comida para perro; lo que fuera para poder sobrevivir.
A pesar de todo, Nasubi se esforzaba por mantener una actitud positiva, saludando a las cámaras cada mañana y celebrando cada pequeña victoria con bailes que contrastaban con su evidente deterioro físico, e incluso se daba tiempo para socializar con un muñeco de peluche que había ganado en uno de los sorteos.
A medida que el programa avanzaba, Nasubi se volvió irreconocible; su cabello creció descontroladamente, su barba y uñas se alargaron, y su cuerpo se debilitó visiblemente. Cuando los paparazzi descubrieron su ubicación, los productores decidieron trasladarlo a otro sitio, donde las pruebas continuaron.
Esta vez, fue llevado a Corea del Sur, donde después de un breve festejo, fue nuevamente vendado y encerrado en una habitación similar a la anterior. Su nueva misión: ganar premios suficientes para conseguir un boleto de avión de regreso a Japón.
Nasubi, lejos de rendirse, alcanzó las metas impuestas, y tras más de 300 días de aislamiento, finalmente fue liberado, sin embargo, el regreso a su país resultó muy extraño, pues aunque estaba feliz de haber superado el reto, las secuelas del encierro no tardaron en aparecer. Le costó varios meses volver a adaptarse a la vida normal, e incluso tuvo dificultades para vestirse, después de tanto tiempo sin ropa.
En septiembre del 2002, el reality show, que inicialmente parecía una prueba de resistencia, fue cancelado por orden del gobierno, pues las autoridades consideraron que el trato recibido por los participantes era inhumano, equiparable a la tortura.
Nota original: El Heraldo de Chihuahua