El Instituto Chihuahuense de Salud Mental (Ichisam) dio a conocer que la "romantización" de la maternidad, es sumamente común en la sociedad, y se trata de un término que referencia al estereotipo que se crea sobre las mamás y futuras madres, como "reinas de la felicidad, tranquilidad y realización", que puede traer sentimientos negativos en la salud mental de las mujeres.
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La dependencia informó que todo el proceso del embarazo, lactancia y la maternidad, se asocia con emociones positivas como la alegría, el amor y la satisfacción, y en la mayor parte de los casos es así.
Lo anterior, no da cabida a otras emociones como la frustración, la molestia o tristeza que puede implicar para algunas mujeres esta etapa, y es cuando el hecho de "romantizar", puede afectar sus emociones.
El Instituto señala que al romantizar la maternidad, "básicamente decimos que sólo hay una forma de ser la mamá perfecta", sin embargo, se ignoran momentos difíciles que atraviesan algunas mujeres, ya que no todas enfrentan los mismos retos o viven una historia similar.
En este contexto, la idea de "la mamá perfecta" significa una presión en las mujeres cuya experiencia no es como tal, ya que en general, se espera que siempre estén sonrientes y que dejen de lado sus necesidades, por el nacimiento de su hijos, cuando no siempre es posible.
Este estereotipo, provoca que las mamás que atraviesan retos difíciles, se sientan ansiosas, estresadas y presionadas al estar frente a la figura "ideal" de la madre contra su realidad.
Por lo anterior, es necesario que como sociedad, recordemos que aunque una mujer esté preparada para la maternidad, está etapa puede tornarse agotadora y complicada, por lo que es importante ser una red de apoyo a su alrededor.
El Instituto señala que la familia y las personas más allegadas, pueden ser de gran apoyo para que las mujeres que se sienten estresadas o presionadas, incluso deprimidas, sientan confianza de comunicar cómo se sienten.
El abrir esa puerta, para escuchar y comprender, también permite validar los sentimientos y emociones, de una forma genuina, y sin culpas, pues la maternidad no define a una mujer.
Para finalizar, el Instituto de Salud Mental invitó a conocer más sobre cómo ser empáticos con las personas que nos rodean, principalmente con quienes pasan por una serie de cambios físicos, hormonales, sociales y en todo su entorno, como ocurre durante el embarazo.
Nota original en El Heraldo de Chihuahua