Hace unos días Fernando F. C., conocido como "El Cuervo", fue condenado a 16 años de prisión por la desaparición forzada del activista Cruz Soto Caraveo, mismo que fue encontrado muerto días después, pero ¿Sabes por qué peleaba y que fue lo que pasó?
El activista era originario de Monteverde en el municipio de Guazapares, dentro de la imponente Sierra Tarahumara, y fue una de las cientos y quizás miles de personas que han sido desplazadas por la actividad del crimen organizado y la siembra de drogas en la zona conocida como el Triángulo Dorado.
A causa de esta violencia a Cruz Soto, a su familia y muchos más les fue arrebatada su tierra, por esto realizó labores en contra de esto, con el fin de algún día regresar a su hogar, en 2018, lo lograron.
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En agosto del año mencionado pudieron regresar a sus hogares resguardados por medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y escoltados por la Policía del Estado.
Solo un día después de su regreso la esposa del activista fue asesinada, y junto con su cuerpo quedó una amenaza pues desde 2014 Cruz Soto exige la detención de los responsables de tomar las tierras, entre ellos los líderes de la célula del Cártel de Sinaloa, Gente Nueva, presuntamente a cargo de José Noriel P. G., alias “El Chueco".
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Más de un año después de ese evento, en octubre del 2019 Cruz Soto volvía a su municipio de origen, Guazapares, ahora Témoris, la cabecera, donde sostuvo una reunión con Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural del gobierno federal, el sábado 12 del mencionado mes.
El día 13, el activista se dirigió a la comunidad de los Llanos, cuando fue interceptado por un grupo de personas armadas, y privado de su libertad, una semana después, el 20 de octubre, fue encontrado sin vida en la localidad de La Lechuguilla.
Han pasado casi cuatro años desde su muerte y se ha condenado a Fernando F. C. “El Cuervo" y a Paulino M. R., quien en ese entonces era el secretario de Seguridad Pública en Guazapares, así mismo están detenidos y en proceso Samuel M.O y Luis Enrique M. G., alias “El Chulina”.
A Cruz Soto Caraveo se le fue arrebatada su tierra y su familia, lamentablemente es la realidad de más del 70% de personas que abandonan su hogar en Chihuahua, pues viven un desplazamiento forzado a causa del crimen.