Hablar de Talamantes es hablar de una bella localidad de la región sur de Chihuahua, localizada a sólo siete minutos de Valle de Allende, donde abundan los nogales y las áreas verdes, el lugar perfecto para disfrutar un día de campo familiar o con los amigos. Este poblado que está a menos de treinta minutos de Parral, cuenta con hermosos sitios naturales y ni hablar de su gran legado histórico.
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Según consta en documentos, Talamantes tiene su registro más antiguo el 7 de octubre de 1740, cuando un español criollo, llamado Simón Talamantes. compró tierras en el territorio, construyó una hacienda de estilo colonial, misma que bautizó como “Talamantes”, en la cual se desarrolló la Batalla de Talamantes, un enfrentamiento entre las fuerzas liberales chihuahuenses, encabezadas por Octaviano López y una fracción conservadora de Durango.
A diferencia de las áreas aledañas donde el clima es semidesértico, Talamantes tiene un entorno mayormente llano y cubierto de vegetación. Esta zona rural cuenta con menos de 500 habitantes, según revelan las estadísticas del Inegi.
-¿Qué hacer en este pueblito fundado hace 284 años?
Aquí te vamos a dar un tour virtual para que conozcas los principales atractivos de Talamantes:
-Empezamos por la colonial Hacienda Talamantes
No puedes visitar este poblado sin admirar esta antigua hacienda, que como ya te platicamos renglones arriba fue escenario de la Batalla de Talamantes en 1860. La Hacienda Talamantes se ubica en la calle Libertad, y a pesar de que no se ha conservado en su totalidad, aún se puede admirar su fachada junto con algunos elementos arquitectónicos coloniales.
Además de un paseo para estar en contacto con la naturaleza y disfrutar de un día de relajación, la oportunidad de conocer sitios históricos como este harán que tu visita valga la pena al 100%.
-¿Sabías que ahí construyeron una fábrica de hilos?
Aunque no lo creas, esta fábrica textil, según cuentan era la más antigua del estado, siendo fundada en 1853 y al principio del siglo XX aún estaba en operación. Esta fábrica era de un italiano llamado José María Sini, la inversión fue de 25 mil pesos y 30 mil pesos en maquinaria y edificio, contaba con dos mil 80 husos y 200 telares. Hoy sólo queda la estructura del inmueble, pero con un enorme valor histórico.
-Sus históricos callejones y la legendaria plaza
No puedes visitar Talamantes sin tomarte las fotos del recuerdo en su tradicional plaza principal y un paseo por sus ancestrales callejones. Su plaza principal es la parte central del poblado y está rodeada de peculiares callejuelas, justo en la mitad podrás observar su pequeño kiosco decorado al estilo colonial.
-¿Te gusta pescar? ¡Ven a la presa de Talamantes!
Si visitas esta población en temporada de Cuaresma, te encontrarás con que los fines de semana, decenas de familias acuden a pescar para disfrutar de un rico pescado fresco preparado en el disco. Esta presa también es conocida como “El Durazno” y al igual que el ojo de Talamantes, este cuerpo de agua recibe cada año a cientos de visitantes, sobre todo en verano, quienes acuden a descansar a la sombra de los nogales. A diferencia del Ojo, las aguas del presón tienen una mayor profundidad y están habitadas por diversas especies de peces como carpa y mojarra.