El Hospital de Jesús es un ejemplo emblemático de altruismo y compromiso social que ha perdurado a lo largo del tiempo en la ciudad de Parral. Fundado en 1908, esta institución nació de la generosidad de los parralenses, quienes se unieron con un objetivo común: proporcionar atención médica a los más necesitados y desde sus inicios, el hospital ha sido un faro de esperanza para aquellos que carecen de recursos.
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La creación del Hospital de Jesús fue posible gracias a las donaciones y el apoyo de personalidades destacadas de la sociedad parralense. En un momento en que el acceso a servicios de salud era limitado, los habitantes de Parral mostraron una gran disposición para colaborar en esta noble causa. Su esfuerzo conjunto permitió la apertura de un establecimiento que, desde entonces, se ha dedicado a ofrecer servicios de salud de alta calidad, adaptándose a las necesidades de su población.
A lo largo de sus casi 120 años de historia, el hospital ha enfrentado numerosos desafíos. Uno de los eventos más significativos fue la devastadora inundación de 1944, que casi llevó a la institución al colapso. Sin embargo, la resiliencia de la comunidad y su inquebrantable compromiso con el bienestar de sus habitantes permitió que el Hospital de Jesús se recuperara y continuara su labor, reforzando su importancia en la atención médica de la región.
Las crónicas del pasado revelan historias fascinantes sobre el hospital y su evolución. Desde su fundación, ha sido testigo de cambios sociales y avances en la medicina. El Hospital de Jesús ha sabido adaptarse a las transformaciones del tiempo, incorporando tecnología de vanguardia y contando con profesionales altamente capacitados, lo que le permite seguir ofreciendo servicios de salud de calidad.
Hoy en día, el Hospital de Jesús sigue siendo un referente en el ámbito de la salud en Parral. Su legado de altruismo y servicio a la comunidad no solo perdura, sino que se fortalece con cada nueva generación. A través de casi un siglo y dos décadas, la institución ha demostrado que la solidaridad y el compromiso pueden superar cualquier adversidad, continuando su misión de atender a los más vulnerables y garantizando que, independientemente de las circunstancias, siempre habrá un lugar donde encontrar atención médica digna y accesible.
¿Por qué surgió el Hospital de Jesús en Parral?
El Hospital de Jesús surge como sucesor de lo que fue el primer hospital que se erigió en tierras chihuahuenses y que llevó por nombre Hospital de San Juan de Dios, el cual prestó sus servicios por más de 200 años hasta que desapareció a principios del siglo XX a causa de las altas y bajas de la minería.
Para 1900 todavía estaba en funciones el Hospital de San Juan de Dios, aunque no en el lugar donde inicialmente se construyó cuando se empezaba a poblar el Real de Minas de San Joseph del Parral, hoy Hidalgo del Parral.
El hospital se localizaba frente a lo que hoy es la Plaza Guillermo Baca, precisamente a un costado del Templo de San Juan de Dios, donde se venera a la Virgen de la Soledad, patrona de Chihuahua y Reina de los Mineros.
Dicho edificio fue construido en 1682 bajo la dirección de Don Antonio de Urecha junto con el templo de San Juan de Dios, pero empezó a funcionar como hospital hasta el año de 1695 y se atendía a mineros pobres, por lo que fue una obra de gran sentido social, nobleza de sentimientos y compasión cristiana para los que sufrían la esclavitud, miseria y enfermedades.
Este hospital también se construyó gracias a la buena disposición de los habitantes de la época, quienes se cooperaron en esta obra de beneficio en la ciudad de Parral que era el lugar más floreciente de la Nueva Vizcaya y junto con la Cofradía de la Pura y Limpia Concepción, fue posible fundar el primer hospital en tierras chihuahuenses.
Por alguna razón el hospital de San Juan de Dios cambio de domicilio y el edificio que ocupaba fue habilitado para lo que hoy es la Escuela 99. En 1900 se localizaba en la calle Carlos Fuero llegando hasta las márgenes del río, el cual contaba con Constancia de Lille y María Marshall como sus principales benefactoras, quienes sostenían el nosocomio con lo que se recababa en festejos populares, kermeses y otros eventos.
¿Cuándo nació la idea de un nuevo hospital?
Fue en 1907 cuando nació la idea de crear un nuevo hospital al desaparecer el San Juan de Dios, ya que esto limitaba el acceso a servicios de salud y fue Emilia Hevia que tomó la iniciativa y creó la fundación Beneficencia del Hospital de Jesús, también conocida como Junta de la Caridad, aportando el primer donativo de 30 mil pesos y otro de 200 pesos mensuales para la atención de los pacientes por parte de religiosas.
Además, se formó un patronato que fue integrado por Esteban Benítez Lumbier, Francisco Gómez, Rodolfo Valles, Miguel Chávez Domínguez, Secundino Hevia, Rodolfo Chávez, Dr. Telésforo González, Federico Stallforth, Antonio Mena, Felipe Schaeffer y el Lic. Guillermo Porras.
El donativo de Emilia Hevia motivo a la sociedad en general a apoyar el proyecto, incluida Constancia de Lille que colaboró con más de 10 mil pesos, los habitantes se empezaron a agrupar para apoyar esta noble causa e inclusive la Junta de la Caridad representada por Francisco Gómez hizo la donación del terrero y edificio donde estaba el antiguo hospital.
¿En qué año inicio funciones el Hospital de Jesús?
De esta forma gracias a las donaciones y apoyos de la sociedad quedó debidamente funcionando la institución de beneficencia Hospital de Jesús, al cumplir con todos los requisitos en el año 1908 y un año después obtuvo la personalidad jurídica, el 30 de septiembre de 1909.
El hospital siguió funcionando en el edificio ubicado en la calle Carlos Fuero, pero con el paso del tiempo tuvo que pasar por diferentes eventualidades como movimientos políticos, sociales y económicos, así como la época de la revolución al prestar sus servicios a las fuerzas beligerantes, siendo respetado por las actividades de caridad y por la noble misión que desempeñaba.
El Hospital de Jesús logró sobrevivir a la inundación de 1944
Aún y cuando en la inundación de 1936 el edificio no sufrió daños, dejando solo el susto a los enfermos que tuvieron que ser evacuados, el evento más significativo fue la devastadora inundación de 1944, un verdadero desastre que destruyó totalmente todo lo que pertenecía al hospital en la calle Carlos Fuero, terreno que hoy en día ocupa el Club Río de Janeiro.
Todo se perdió, los servicios que ofrecía quedaron suspendidos y el hospital hizo mucha falta por algún tiempo, pero la resiliencia de la comunidad y su inquebrantable compromiso con el bienestar de sus habitantes permitió que el Hospital de Jesús se recuperara y continuara su labor.
Siendo en ese tiempo el único hospital de importancia que existía por lo menos 100 kilómetros a la redonda y donde se atendía a pacientes de la región de Parral y del norte de Durango, semanas después del desastre y fiel a su espíritu de caridad que le dio vida, el hospital volvió a funcionar a menor escala, al improvisarse una clínica en la calle Del Rayo atendida por religiosas de la comunidad “Mínimas de María”.
De nuevo el altruismo de los parralenses se puso de manifiesto para levantar de nuevo el hospital y en Chihuahua el comité pro damnificados de Parral reunió fondos y donó 100 mil pesos para que se reconstruyera un nuevo edifico, así mismo el Lic. Manuel Gómez Morín hizo la donación de 30 mil pesos.
Además, hubo aportaciones como la de Luis García, siendo la más representativa, la donación del terreno de más de 4 mil 500 metros cuadrados, donde se construiría el nuevo hospital, ubicado en la esquina de las calles Zaragoza y Eugenio Cintrón.
El nuevo edificio se construyó en el lugar con las aportaciones realizadas por la sociedad parralense y consta de dos pisos, tiene capacidad para camas, pabellón de maternidad, sala de primeros auxilios, rayos X, oficina, botica, cocina, salas generales, salas de operación, patio, capilla, casa para las religiosas que dirigen el hospital y la Escuela de Enfermería.
Todo esto fue posible gracias al altruismo y compromiso social que ha perdurado a lo largo del tiempo en la ciudad de Parral y es de destacar también el generoso donativo que hiciera en 1959 al morir la Sra. Belem Baca de Sánchez Celis, para su sostenimiento y que consistió en seis casas habitación y de 10 mil pesos.
Fue así como el nuevo Hospital de Jesús se estrenó y empezó a funcionar en la calle Zaragoza No. 70 para brindar servicio, el 24 de mayo de 1949, el cual fue inaugurado por el presidente de México, Lic. Miguel Alemán Valdés y con la presencia del obispo Antonio Guizar y Valencia.
En la actualidad el Hospital de Jesús es una fundación de beneficencia privada y brinda servicios de salud de alta calidad a sus pacientes, con una amplia gama de servicios y es atendido por profesionales, tanto médicos como enfermeras, la mayoría egresadas y tituladas con una licenciatura de la propia Escuela de Enfermería del Hospital de Jesús.
Por cierto, en el año 2020 el hospital fue remodelado para continuar brindando una atención de calidad y sobre todo adaptarse a los nuevos tiempos y necesidades, utilizando tecnología de vanguardia y equipos de última generación.
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