Doña Titina fue una mujer con un lindo corazón y que no ofendió a nadie, y que además amaba a su familia, pero desafortunadamente sufrió la terrible enfermedad de hipotiroidismo, misma que heredó a su hija Chanita. Su enfermedad y la ignorancia e indiferencia de vecinos y de las propias autoridades, fueron la causa de mucho sufrimiento durante su vida, hasta su muerte en el Asilo de Ancianos San Vicente.
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Según narra Manuel Armendáriz Chávez, en la página Parralenses Alrededor del Mundo, recordando la famosa Vecindad de Guadalupe, en el Barrio del Topo Chico, donde según vivía mucha gente fuera de lo común, pero no era el caso de Doña Titina y su hija, quienes habitaba muy cerca, ya que estaban cuerdas porque se podía platicar con ellas y a todo respondían bien.
La Vecindad de Guadalupe se encontraba muy cerca de los rieles del tren por el túnel que une a la colonia Topo Chico con el Barrio de La Chole y explica Manuel Armendáriz Chávez en su publicación, que al parecer ahí vivían puras gentes que tenían problemas mentales y recuerda a Pirri Loco y Cholita, una niña que en una ocasión aventó el tren y rodó hacia abajo, a la cual levantaron toda enensangrentada.
Además, recuerda que no era el caso de Titina y su hija Chanita, quienes estaban cuerdas porque platicaba con ellas y a todo respondían bien, lo mismo que Chu Botellas.
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¿Cómo era la enfermedad que padecía doña Titina?
Desafortunadamente la terrible enfermedad de hipotiroidismo que sufrió Titina y que heredó a su hija Chanita, fueron la causa de tanto sufrimiento por la falta de sensibilidad y la indiferencia de los vecinos, así como de las autoridades para brindarles apoyo.
Es bueno saber que las personas que tienen hipotiroidismo, lo más clásico que les pasa es cansancio, intolerancia al frío (carácter muy friolero), apatía e indiferencia, depresión, disminución de memoria y de la capacidad de concentración mental, piel seca, cabello seco y quebradizo, fragilidad de uñas, palidez de piel, aumento de peso, estreñimiento pertinaz y somnolencia excesiva.
Doña Titina tubo otra hija, que fue la primera y mucho mayor que Chanita, se llama Rosa y la dio en adopción, los padres adoptivos la trataban muy bien y se fueron a Chihuahua, pero nunca la procuró porque le daba vergüenza tener una mamá así.
En la publicación también se menciona que doña Julia Chávez, vecina que vivía frente a su casa, afirmaba que doña Titina era muy tímida y siempre andaba con su hija, a la cual vestía de niño.
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Su hija muere de forma trágica en el hospital
Del porque vestía a su hija como niño, según una vez el padre Pineda platicó que vestía a su hija como hombre, para protegerla porque a la misma señora la habían violado y no quería que a su hija le pasará lo mismo y por eso decía que era niño.
Todavía, una mayor desgracia habría de sufrir doña Titina, ya que desafortunadamente su hija; Chanita, también fue violada y lamentablemente, a la hora del parto falleció en el hospital.
Doña Titina que era muy tímida y para salir adelante preguntaba a las vecinas que sí tenían ropa para lavar y en muchas ocasiones la gente la apoyaba con comida, para lo cual se iba al patio o corral, donde estaba el lavadero y ahí comía, porque le daba pena que la miraran.
Quien también la apoyaba todos los sábados, fue Benjamín Galván, ya que llegaba a la Estrella, departamento de caballeros, por 20 centavos, que le dejaba en una bolsita con monedas.
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Doña Titina murió sola en el Asilo San Vicente
Con el tiempo, fue internada en el Asilo de Ancianos San Vicente, con la tristeza reflejada en su rostro y ahí las personas querían sacarle plática, pero narra Manuel Armendáriz Chávez, que lo único que esperaba era fallecer y reunirse con su hija.
Fue así como doña Titina murió en la soledad en el Asilo San Vicente, luego de llevar una vida de tristeza y sufrimiento.
Manuel Armendáriz Chávez también hace una reflexión en su publicación y llama a tener sensibilidad y respeto por las personas que no son tan afortunadas en sus vidas, como el caso de doña Titina, quien no tuvo la culpa de no haber tenido tanta suerte y murió en el abandono en un asilo. ¡Que Dios tenga a doña Titina y a su hija Chanita en su Santa Gloria!