Apagar correctamente un vehículo con transmisión automática pareciera una actividad que no tiene ciencia, pero debes saber que hacerlo de manera equivocada puede acortar la vida útil del sistema derivando en reparaciones costosas. Aunque muchos conductores no le dan mucha importancia a este proceso, un mal hábito al apagar el motor puede generar problemas en la transmisión, uno de los componentes más importantes y delicados del automóvil.
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¿Cómo debo apagar mi vehículo automático?
El primer paso al estacionar un vehículo automático es asegurarse de que esté completamente detenido. Es importante evitar cambiar la palanca a "P" (parking) mientras el auto todavía está en movimiento, ya que esta acción puede dañar los engranajes de la transmisión. El vehículo debe estar completamente inmóvil antes de realizar cualquier cambio en la palanca de velocidades.
Una vez detenido el auto, lo recomendable es primero poner la palanca en "N" (neutral) y después activar el freno de mano, ¿por qué? pues para evitar que todo el peso del vehículo recaiga sobre el mecanismo de bloqueo de la transmisión. Si el auto está en una pendiente, el freno de mano soportará el peso, evitando que la transmisión se desgaste o sufra un daño innecesario.
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Después de haber activado el freno de mano, se puede cambiar la palanca a "P" (parking). Al hacer esto, el sistema de bloqueo de la transmisión ya no soportará el peso del vehículo, lo que reducirá en gran medida el desgaste de la transmisión. Este pequeño cambio en el orden al apagar el auto puede evitar descomposturas y reparaciones costosas en el futuro.
Errores más comunes de los conductores de vehículos automáticos
Uno de los errores más comunes que cometen los conductores es apagar el vehículo mientras todavía está en "D" (drive) o "R" (reversa), al hacerlo se corre el riesgo de dañar la transmisión, así como comprometer otros sistemas del auto, como el encendido. Por ello, siempre es importante asegurarse de que la palanca esté en "P" antes de apagar el motor.
En situaciones donde el conductor tiene prisa, algunos suelen saltarse el paso del freno de mano y cambiar directamente a "P". Aunque esto puede parecer más rápido, es un error que, a largo plazo, podría costar mucho. La transmisión automática no está diseñada para soportar el peso del auto por sí sola, especialmente en pendientes.
Otro consejo útil es evitar mantener el auto en "D" cuando se está detenido por largos períodos, como en un semáforo o en un tráfico pesado. Mantener la transmisión en "D" mientras el auto está detenido genera un desgaste adicional, ya que el sistema sigue tratando de impulsar el vehículo. En estos casos, cambiar a "N" es una opción más adecuada.
El mantenimiento regular también es indispensable para prolongar la vida útil de la transmisión automática. Revisar y cambiar el aceite de la transmisión según las recomendaciones del fabricante es indispensable. Un aceite limpio y en buen estado permite que los engranajes funcionen correctamente y sin fricción innecesaria.
La manera de conducir también influye en el cuidado de tu vehículo
Conducir de manera suave también influye en la durabilidad de la transmisión. Evitar aceleraciones bruscas y cambios de marcha repentinos reduce el esfuerzo al que se somete la transmisión. Conducir de forma agresiva, especialmente en vehículos automáticos, puede acortar la vida útil del sistema.
Es importante mencionar que no todos los vehículos automáticos tienen las mismas especificaciones, por lo que siempre es recomendable revisar el manual del propietario para conocer las mejores prácticas para tu modelo específico. Algunos vehículos pueden tener características adicionales, como sistemas de apagado automático que ayudan a proteger la transmisión.
Tómalo en cuenta, apagar correctamente un vehículo automático es un hábito que puede marcar la diferencia en su mantenimiento a largo plazo. Siguiendo estos sencillos pasos, se puede evitar el desgaste prematuro de la transmisión y reducir el riesgo de costosas reparaciones a futuro.