Desde pequeños se no ha inculcado la cultura del hábito del baño por ser saludable para nuestro cuerpo, ya que nos ayuda a deshacernos de las bacterias que causan el mal olor, pero a la vez surge la interrogante de si es necesario bañarse a diario para mantener una buena higiene o cuántas veces es recomendable ducharse por semana, por lo que aquí te diremos qué es lo ideal de acuerdo a la ciencia.
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Siempre es imprescindible mantener una buena higiene personal para evitar que te digan la famosa frase “Te chilla la ardilla”, una expresión muy mexicana y que es la forma de decir que necesitas usar desodorante porque ya sea tus axilas o alguna parte intima de tu cuerpo hule mal, lo cual perciben las personas a tu alrededor y sin duda un baño es el remedio más seguro para librase de ese olor desagradable y provocar una sensación de limpieza.
En nuestro día a día un baño puede ser placentero y relajante para muchas de las personas, aunque esto depende de varios factores como el clima, el nivel de actividad física y el tipo de piel, lo que al final determina cuántas veces debes ducharte a la semana para estar limpio.
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¿Cuántas veces debes ducharte a la semana para estar limpio según la ciencia?
Con todo y que el baño diario pareciera lo más normal en la higiene personal, según estudios recientes e investigaciones científicas sugieren que no siempre el ducharse todos los días es lo más recomendable y saludable, ya que incluso puede ser perjudicial para la piel.
Especialistas de la Universidad de Harvard en base a las investigaciones realizadas, recomiendan no excederse con el baño diario, ya que el agua caliente y los productos de limpieza pueden eliminar la capa natural de grasa que protege la piel, dejándola expuesta a bacterias y alérgenos.
De acuerdo a los expertos de Harvard, la piel humana mantiene una capa de aceite y bacterias que en su estado normal son “buenas” y cuando una persona se baña a diario utilizando agua caliente puede producir un impacto perjudicial para la dermis humana como resequedad de la piel, irritaciones y picazón; piel seca, lo que permite que los microorganismos presentes sobre ella produzcan infecciones y reacciones alérgicas.
Además, los jabones antibacterianos pueden matar las bacterias “buenas” para la piel, alterando el equilibrio vital y fomentando la aparición de bacterias más fuertes y resistentes; así como también debilitan el sistema inmunológico humano que necesita exponerse a patógenes externos y suciedad para generar anticuerpos y proteger a la persona.
Por lo anterior, es que diversas investigaciones intentan responder a la pregunta de cuántas veces hay que bañarse a la semana para estar saludable, llegando a la conclusión de que las duchas diarias no mejoran la salud y pueden causar los problemas de la piel ya mencionados.
Es por ello que los especialistas de la Universidad de Harvard recomiendan no excederse con las duchas diarias y afirman que lo ideal es bañarse entre 3 y 4 veces por semana, pero todo esto dependerá de varios factores como el clima, la actividad física y por supuesto el tipo de piel.
Es así como los estudios e investigaciones determinan que bañarse entre 3 y 4 veces por semana es suficiente para mantener una buena higiene en la mayoría de las personas, a menos que se realice una intensa actividad física o se viva en un clima caluroso, situaciones en las cuales es recomendable el baño diario porque la persona se encuentra sucia y sudorosa.
En la mayoría de las personas, excepto en las condiciones antes mencionadas, no es necesario bañarse todos los días, pero lo mejor es encontrar el equilibrio ideal entre la higiene personal y el cuidado de la piel, ya que esto último protege la barrera natural en defensa de infecciones y alergias.
Otro aspecto a destacar es que el agua con la que nos bañamos diariamente puede contener sales, metales pesados, cloro, flúor, pesticidas y otros químicos que también causen problemas a la salud de una piel seca, lo cual se puede evitar si las duchas son menos frecuentes y se recomienda que sean con agua tibia en lugar de caliente para evitar resecar la piel.
De acuerdo a la condición biológica y a que el cuerpo de cada persona es distinto, aunado al clima y la actividad física que se realice, es lo determinará la frecuencia ideal del baño, que puede ser diario o de tres a cuatro veces por semana, según la recomendación de los expertos de Harvard.