Con el paso del tiempo inexorable en nuestra vida, el cual se refleja en la piel, las personas suelen irremediablemente empezar a buscar opciones y alternativas que frenen un poco “el paso de los años”, como el colágeno. Sabemos que “la piel envejece”, lo cual es inevitable. Las principales causas son los cambios hormonales y un estilo de vida poco saludable al reducirse los niveles del ácido hialurónico natural de la piel, lo cual origina arrugas profundas.
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Así, buscar no tener arrugas no es banal ni menos vanidoso; aunque así lo parezca cuando surgen de manera prematura, sino más bien es reconocer precisamente la naturaleza del tiempo; pero también lleva a la persona a atenderse médicamente y consultar un dermatólogo que ayude a la corrección de ciertas imperfecciones de la piel.
"Las patas de gallo"
En este contexto, las arrugas son una fragmentación de las fibras elásticas de la dermis. Su nombre científico es Ritidosis, afirma la dermatóloga Rosa María Ponce Olivera, académica de la Facultad de Medicina de la UNAM, quien recomienda consultar a un experto en la materia para corregir un eventual problema de la piel.
Popularmente, a algunas arrugas se les conoce como “patas de gallo”, las cuales son finas y profundas marcas en la piel, las cuales aparecen cuando el tejido orbicular es extremadamente sensible y se van formando en la cara del paciente.
Los beneficios del colágeno
Es importante subrayar que, de acuerdo con la Profeco, el colágeno es un suplemento alimenticio y no debe confundirse con un medicamento. Su consumo está destinado a complementar la ingesta diaria de proteínas y a no tratar o prevenir enfermedades.
Entre sus beneficios está en que, al ser un complemento alimenticio, ayuda a proteger la piel de agentes externos, la humecta atacando incluso la flacidez en el cuerpo, según especialistas.
En este tema, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), publicó un exhaustivo estudio sobre las marcas del colágeno en el mercado mexicano. Este análisis forma parte del esfuerzo por asegurar los beneficios del producto, su comercialización que debe cumplir ciertos estándares de calidad y seguridad para el consumidor.
El colágeno es una proteína esencial que juega un papel crucial en la estructura de la piel, huesos, tendones y otros tejidos del cuerpo. Con el aumento de su popularidad como suplemento alimenticio, la Profeco analizó hasta 32 marcas disponibles en el mercado y que pueden beneficiar a la persona.
La información publicada proporciona un panorama sobre la calidad y precio de los productos, permitiendo a los usuarios tomar decisiones bien informadas al elegir alguna marca.
Las marcas recomendadas por Profeco
En el análisis de la Profeco y dentro de las pruebas elaboradas destacan tres marcas como las mejores. El estudio se centró en diversos aspectos, incluyendo el contenido del colágeno por porción, costo y pureza del producto.
Así, dentro de estas características está el colágeno Cahuenga, el cual sobresale al proporcionar 8.3 gramos por cada porción diaria del producto. Su alto contenido asegura que el consumidor obtenga una dosis suficiente para lograr los primeros beneficios.
La segunda opción de marca es utilizarlo Al Natural, por sus características y bajo precio. Esta tiene un precio accesible para el consumidor y se expende desde la presentación en 300 gramos.
Y la tercera marca recomendada por la Profeco se refiere al Colágeno Hidrolizado Plus, el cual se coloca como las mejores opciones incluso para el bolsillo del consumidor, se encuentra en presentaciones de 400 gramos.
Al respecto, la Profeco recomienda al consumidor que, al escoger una de estas tres marcas del suplemento, es importante considerar no sólo el precio, sino la calidad del producto, transparencia en etiquetado y sobre todo las recomendaciones al momento de utilizarlo. “Nuestro objetivo es asegurar que el consumidor tenga acceso a productos que ayuden a la salud y sobre todo que sean de buena calidad”, subraya la Profeco.
La dependencia federal destaca que para el usuario es fundamental conocer exactamente qué producto está adquiriendo, para evitar con ello posibles fraudes o malas prácticas comerciales. “Hemos encontrado algunas marcas que cumplen rigurosamente los estándares establecidos; pero en otras han encontrado inconsistencias significativas”, advierte la Profeco.