El parralense Guerrero Pino, representando como capital a la selección de México, se proclamó campeón del mundo de mini futbol, tras imponerse en la gran final al representativo de Brasil con marcador final de 4 goles por 0, en acciones efectuadas este día ante una fuerte lluvia en Perth, el Parque Langley de Australia.
Con esto el representativo de México, hizo buenos los pronósticos y como se dice la tercera fue la vencida, luego de haber perdido las finales en las ediciones 2015 y 2017.
En el juego México se aferraba a una ventaja de 1-0 hasta el minuto 47 cuando Christian Gutiérrez anotó con un cabezazo errante de Leonardo De Oliveira después de un saque de México.
A partir de ahí, Hiram Ruiz anotó dos goles netos vacíos en poco tiempo contra un equipo desesperado de Brasil.
Brasil y México barrieron el juego grupal y llegaron a la final con récords impecables de 6-0. Podría decirse que México tuvo el camino más difícil hacia la final, necesitando vencer a los campeones históricos de minifutbol de la República Checa y Rumania, mientras que el mayor obstáculo de Brasil fue una Hungría en gran medida indiscutible, que perdió el juego por el tercer lugar ante Rumania 1-0, más temprano en el día.
Por su parte, el parralense y capitán del equipo Guerrero Pino, "No tengo palabras para esto, no puedo explicar el sentimiento. Trabajamos muy duro para esto. Fueron muchos sacrificios. Ves que el portero se lastimó. Pero fue una unidad. Estuvimos unidos todo el tiempo desde el día 1 y lo probamos en el campo y fuera del campo. Creo que lo merecemos. Tuvimos nuestros momentos de dificultad pero llegamos”.
Antes del torneo, Ortiz seleccionó al jugador de 29 años para ser el capitán del equipo sobre algunos compañeros más experimentados. "Obviamente tomé la responsabilidad en serio", dijo Pino. “Como mi primera experiencia en este tipo de torneo, los entrenadores lo pensaron y decidieron que yo fuera el capitán y tuve que demostrarme a mí mismo. Obviamente, mantener al equipo unido, ponerme afuera, poner mi cuerpo frente al balón, sacrificarme por el equipo. Al final del día, soy un defensor, así que fue un gran papel, pero asumí la responsabilidad".