Chihuahua, Chih.- La fuga de talentos en el deporte es una realidad, ya que los deportistas del estado deciden vestir los colores de otra entidad para seguir con su carrera deportiva ante la falta de apoyos e instalaciones deportivas adecuadas.
Mejores escenarios, equipamiento y mayores incentivos son algunas de las razones por las que deportistas del estado tomaron la decisión de representar a otro colocándose en los primeros puestos tanto en olimpiadas nacionales así como representando a México en justas internacionales.
El raquetbol es un claro ejemplo de la fuga de talento siendo el estado de Tamaulipas quien ha tomado la iniciativa de reclutar talento chihuahuense siendo la experimentada Nancy Enríquez quien porta otros colores que no son los de chihuahua.
Por su parte Daniela Rico joven raquetbolista quien se coronó campeona mundial juvenil tuvo que emigrar a Tamaulipas para seguir con su carrera en este deporte de la raqueta corta la cual ha puesto a México como los mejores en los juegos Panamericanos en las últimas ediciones, a ellas se les une Alex Landa quien al no ser considerado en la selección nacional se quedó fuera de los juegos Panamericanos de Lima, por lo que tomó la decisión de representar ahora a los estados unidos.
El deporte ráfaga también tiene a la chihuahuense Evelyn Quiroz como otro talento que no veremos vistiendo los colores de Chihuahua ya que la joven quien militó para la Longhorns en Nuevo Laredo Texas, jugará para Tamaulipas.
Otra decena de jugadoras que, al no haber en Chihuahua una liga de basquetbol competitiva, ni tan siquiera un equipo al que puedan representar, decidieron buscar cobijo en otros estados del país y hoy en día todas ellas son figuras a seguir en la Liga Nacional de Basquetbol Profesional femenil.
Ingrid Martínez (Aguascalientes), Paola Estrada (Zacatecas), Sofía Payán y Eli Cera (Nayarit), Ana Karen Bernal (Saltillo), Ivana Gutiérrez, Guanajuato), Yazmin Saad, Daniela Saad, Elena Martínez y Gladiana Ávila (Jalisco), son algunas de las chihuahuenses que están siendo profetas en tierras ajenas, gracias a que su Estado, en materia de basquetbol, dejó de ser “Grande” desde hace muchos años y en la actualidad no tiene ni pies ni cabeza, y ni mucho menos se ve para cuando resurgir con todo y sus contados equipos varoniles que, plagados de extranjeros, traen un poco de espectáculo jugando en LBE y en LNBP.
Otro claro ejemplo es el de la marchista oriunda de Ojinaga Chihuahua Alegna González quien al no tener el apoyo requerido para su competencias, fue reclutada por el estado de México en la cual la atleta hoy en día es la mejor en su disciplina ganando múltiples medallas en olimpiada nacional además de estar lista para representar a México en los próximos juegos olímpicos de Tokio 2020.
La fuga de talentos en el deporte es una realidad que se ha ido naturalizando en el común de lo cotidiano, pero que indiscutiblemente ‘afecta’ de una parte o ‘beneficia’ de otra, tanto a los mismos deportistas como a los departamentos del deporte.
Sin duda alguna el ciclismo tiene a los juarenses Alejandro Reséndez quien representa al estado de Puebla y a Jessica Bonilla quien viste los colores de Guanajuato donde ambos seleccionados nacionales han conquistado medallas panamericanas.
Ante esta situación, surgen interrogantes sobre la identidad deportiva, el sentido de pertenencia, pero también entender que en su condición los talentos deportivos buscan proyección.
Es necesario el diseño de estrategias que busquen la retención de nuestros talentos, permitir su migración es un error, que en el largo plazo demuestra la escasa consolidación de nuestros verdaderos procesos deportivos.