Migrantes causaron daños al ex cuartel militar de Jiménez durante el lapso que el edificio histórico se utilizó como albergue para los indocumentados. Los centroamericanos tumbaron parte de la cubierta del enjarre de las ventanas, y quebraron ladrillos de los marcos de las puertas. Aunado al deterioro que está causando la precaria instalación de mini splits, que dejan escapar agua, causando que muros se manchen y humedezcan.
En meses pasados, las instalaciones del ex cuartel militar de Jiménez, fueron utilizadas como albergue temporal para los indocumentados que eran asegurados por las autoridades, lo cual causó deterioro en el inmueble.
El pasado viernes, en dicho inmueble se llevó a cabo un evento para conmemorar un aniversario más de la conformación de la división del norte en Jiménez, por lo que se pudo constatar el daño que sufrió el edificio histórico.
En los marcos de varias ventanas, se pudo ver como el enjarre fue tumbado, dejando ver parte de la estructura interna del inmueble. Asimismo ladrillos delos marcos de las puertas, se encuentran quebrados.
Pudiera parecer poco el daño en el lugar, sin embargo se trata de un gran deterioro, tomando en cuenta que se trata de un edificio histórico, el cual no hace mucho fue rehabilitado y rescatado de las ruinas.
Quienes se encontraban en el evento, afirmaron que efectivamente dichos estragos habían sido causados por los indocumentados centroamericanos que fueron albergados ahí antes de ser repatriados.
Sin embargo el problema no termina ahí, la precaria instalación de equipos de ventilación, específicamente mini splits, cuanta con fugas de agua, la cual escurre por los muros de la finca, generando así que las paredes comiencen a mancharse.
No obstante, la afectación derivada de la falla en el equipo de ventilación va más allá de lo sextetico, sino que en algunas secciones, los muros comienzan a humedecerse, lo cual, por la antigüedad del ex cuartel, podría provocar la debilitación de la estructura.
Ante ello, ciudadanos piden al municipio se intervenga el lugar y con ello poder seguir preservando el edificio que ha formado parte del patrimonio cultural e histórico de la vieja Huejoquilla y del que se espera algún día, se convierta en un museo.