La historia retrata a Marcelino Serna como un mexicano que ingresó a los Estados Unidos como indocumentado y para no ser deportado se enlistó en el Ejército Estadounidense, para pelear en la Primera Guerra Mundial y por sus hazañas en el campo de batalla y su contribución a este país se convirtió en el militar más condecorado de la también llamada “Gran Guerra”.
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Marcelino Serna, nació el 26 de abril de 1896 en la ciudad de San Francisco del Oro, Chihuahua, en el seno de una familia pobre y en 1916 a la edad de 20 años emigró a Estados Unidos en busca de una mejor vida, cruzando el Río Bravo por Ciudad Juárez para establecerse por un tiempo en El Paso, Texas y después terminar convertido en un héroe de guerra de aquel país.
Al no hablar inglés sus primeros empleos fueron en un ferrocarril y como peón en un campo de remolacha azucarera, para después trabajar también como peón de un campo de lechugas en Denver, Colorado.
Un año después de permanecer en aquel país, en 1917 Estados Unidos le declaró la guerra a Alemania y para ello el ejército comenzó a reclutar nuevos soldados, incluso por la fuerza y Marcelino Serna fue detenido en Denver para verificar su situación legal, por lo que, ante la posibilidad de ser deportado a México, se ofreció como voluntario para ir a la guerra que con el paso del tiempo se convirtió en la más sangrienta de la historia.
Fue así como Marcelino fue reclutado y llevado a un campo militar a la 355 Zona de Infantería, para lo cual después de tres semanas fue enviado a Liverpool con la división de Infantería 89, para luego avanzar a Francia, donde participó en importantes operaciones para la victoria de los aliados.
Hazañas increíbles de Marcelino Serna durante la guerra
Las batallas fueron sangrientas y Marcelino que aún no hablaba inglés y se comunicaba a través de un compañero bilingüe, demostrando ser uno de los mejores elementos por su valor como soldado y cuenta la historia que durante la batalla de San Miguel, una ametralladora alemana mató a dos de sus compañeros y él siguió adelante como explorador de la unidad.
En vida, Marcelino contó a un periodista del Paso Times, que saltaba y corría 10 metros para luego tirarse pecho tierra, hasta que logró llegar al costado izquierdo del enemigo, no sin antes recibir dos balazos en el casco durante el recorrido y desde donde lanzó cuatro granadas, lo que provocó que ocho enemigos salieran con las manos en alto y a quienes detuvo, mientras otros seis habían muerto en el ataque.
La historia también cuenta que, en otro enfrentamiento, Marcelino localizó a un francotirador escondido entre arbustos y antes de que causara alguna baja, le disparó e hirió, para lo cual lo siguió hasta el campamento, al cual lanzó ráfagas y granadas obligando a rendirse a 26 soldados enemigos, mientras que otros 24 murieron en la acometida.
Los 26 soldados detenidos fueron escoltados únicamente por Serna hasta el campamento estadounidense sin recibir ayuda alguna y cuando llegó, sus compañeros querían ejecutar a los prisioneros, a lo que Marcelino se opuso dando muestra de honor y compasión.
Durante los combates Marcelino no sufrió heridas, hasta que a cuatro días del final de la guerra, un francotirador le disparó y resultó herido de las dos piernas, pero no se rindió y logró regresar al campamento utilizando su rifle como muleta.
Condecoraciones que recibió Marcelino Serna
Finalizada la guerra, ya en un hospital donde se recuperaba de sus lesiones se le otorgó el reconocimiento de la Cruz por Servicio Distinguido, pero además también fue honrado con dos cruces de guerra francesas entregadas por el comandante superior de las fuerzas aliadas en Europa.
También recibió la Cruz al Mérito de Guerra Italiana, la Medalla de Honor Francesa, la Medalla de la Victoria con cinco estrellas de la Primera Guerra Mundial, la Medalla de la Victoria con tres barras de campaña, la Medalla de San Miguel, la Medalla de Verdún y dos corazones púrpuras de las fuerzas armadas.
A pesar de ser uno de los soldados más condecorados de la Primera Guerra Mundial, no recibió la Medalla de Honor, al argumentar que era un inmigrante ilegal, un soldado raso y que a parte no hablaba inglés, pero la realidad es que le fue negada, después de obtener la ciudadanía estadounidense, por conservar también su nacionalidad mexicana, ya que en aquella época los prejuicios en contra de los inmigrantes estaban por encima de cualquier razón y se cree que fue por racismo o xenofobia en contra de este gran héroe de guerra de los Estados Unidos.
Fue así como este soldado mexicano, se convirtió en uno de los más condecorados de la historia de Estados Unidos, además de ser el primer hispano en recibir la Cruz por Servicio Distinguido, la segunda condecoración militar más preciada del ejército estadounidense, sólo por detrás de la famosa Medalla de Honor.
Entre las medallas que recibió, se encuentran las siguientes:
- Cruz de Servicio Distinguido, la segunda medalla de combate más alta de Estados Unidos.
- Distinguido Servicio Cruza Dos Croix de Guerre Francés con Palmeras.
- Medalla de Victoria de Verdún Francesa con cinco estrellas.
- Medaille Militaire Francés Croce al Mérito di Guerra Italiano.
- Medalla conmemorativa francesa Medalla francesa de San Miguel.
- Medalla de victoria con tres barras de campaña Dos corazones púrpuras
Terminada la guerra Marcelino regreso a Texas.
Después de llegar a su fin la guerra, Marcelino Serna logró obtener la ciudadanía estadounidense, pero nunca renunció a su nacionalidad mexicana y regreso a vivir una vida de paz a Texas, donde tuvo seis hijos y se dedicó a trabajar en la jardinería hasta su jubilación en 1961.
Marcelino Serna falleció a la edad de 96 años el 29 de febrero de 1992 y fue enterrado con honores militares en el Cementerio Nacional de Fort Lis, como un héroe de guerra del ejército estadounidense.
En el año 2021, el Congreso de Texas propuso otorgar la Medalla de Honor de forma póstuma a Marcelino Serna y un grupo bipartidista de legisladores texanos votaron de forma unánime para dar la medalla al veterano de guerra.
Así el Congreso de Texas saldó una deuda e injusticia que se debía a Marcelino Serna por su heroísmo al pelear en la Primera Guerra Mundial por el Ejército de Estados Unidos, país que sigue debiendo la Medalla de Honor que merecía el soldado oriundo de San Francisco del Oro.
La vida de Marcelino Serna fue llevada de manera impactante a la novela histórica, “En el Corazón de las Trincheras”, libro escrito por el periodista y escritor Julio Godínez.
