Un soldado de los más condecorados en la historia de Estados Unidos, además de ser el primer hispano en recibir la Cruz por Servicio Distinguido, la segunda condecoración militar más valiosa del ejército estadounidense.
Marcelino Serna participó en la Primera Guerra Mundial en 1914, uno de los soldados con mayor valor y prestigio pues capturó 26 elementos del ejército alemán, condecorado con seis medallas, en 1896 nació en el municipio de San Francisco del Oro, una leyenda real hasta hoy muy poco conocido, proveniente de una familia pobre por ello emigró a Estados Unidos donde descansan sus restos.
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Cuantas historias de hombres valientes a través del tiempo se han dado a conocer por sus actos heroicos, batallas ganadas, reconocimientos y gratitud.
Marcelino Serna, un veterano de guerra del primer conflicto mundial condecorado con seis medallas de alto valor en el país de las barras y las estrellas, una leyenda que descansa en el cementerio Fort Bliss en la ciudad del Paso, Texas.
Serna nació en 1896 en el municipio de San Francisco del Oro en una familia pobre, por ello emigró al país vecino, el 6 de abril de 1917, Estados Unidos declaró la guerra a Alemania donde fue detenido junto con otros jóvenes por agentes federales en Denver, Colorado quienes les dieron dos opciones, ser deportados o servir en el ejército por lo que Serna prefirió ingresar en el ejército estadounidense y prestar servicio en la Primera Guerra Mundial para evitar su deportación.
A pesar de no hablar inglés subsistió trabajando en un ferrocarril y como peón en un campo de remolacha azucarera en el estado del país vecino.
Según versiones Marcelino fue enviado a la 355 zona de infantería de la 89 División de la empresa B en el extranjero.
Se le atribuyen hazañas que solo una persona suficientemente valiente lo lograría como capturar a 26 soldados alemanes solo, y al querer sus compañeros ejecutarlos con empatía y respeto prefirió que fueran llevados a prisiones militares.
El mismo Marcelino contó más tarde a un periodista del Paso Times: "Saltaba y corría 10 metros luego me tiraba pecho por tierra, seguí así, hasta que llegué al costado izquierdo del enemigo, dos veces recibí un balazo en el casco durante mi recorrido, al acercarme lancé cuatro granadas a su posición, ocho enemigos salieron con las manos en alto y otros seis habían muerto en el ataque, detuve a los prisioneros hasta que recibí apoyo de nuestras tropas", comentó.
Marcelino Serna obtuvo la ciudadanía estadounidense; sin embargo, nunca renunció a su nacionalidad mexicana, tuvo seis hijos y se dedicó a trabajar hasta el momento de su muerte.
Finalmente Marcelino murió el 26 de febrero de 1992, en El Paso, Texas, y recibió honores militares en el cementerio nacional de Fort Bliss.