La temporada decembrina es un conjunto de fechas en vísperas de un acontecimiento que marcó a la humanidad, pues el verdadero significado estriba en el nacimiento de un ser divino y de ahí su nombre, la NATIVIDAD, del redentor del mundo.
Pero aquél suceso es una prueba fundamental de la más pura humildad que un ser vivo pudo demostrar, nacer en un lugar de lo más sencillo y austero y rodeado de los seres de corazón más noble comenzando por sus propios padres en la tierra.
Es esa humildad la que debemos ponderar en estas fechas a través de nuestros actos para con los demás, pues nuestras acciones basadas en la humildad marcará con gran importancia la vida de los demás.
Para quienes hoy por hoy tenemos el alto honor de representar a una comunidad desde la administración pública estamos convencidos de que, aplicar políticas con alto sentido solidario es una prioridad irremplazable.
Eso significa comenzar el día pensando en cómo realizar aquellas acciones que de la manera más colectiva posible, vayan dedicadas a paliar o a resarcir las problemáticas que atañen a una sociedad.
Desde nuestra llegada al ayuntamiento de Parral, mi familia, mis colaboradores y todo el equipo estamos empecinados en servir de manera responsable, decidida y con la finalidad primera del beneficio social a través de cada proyecto que emprendemos.
El concepto de un gobierno solidario, cercano a la gente, de puertas abiertas, en campo, fuera de una oficina, es la mejor vía para conocer de primera mano lo que las personas necesitan, de ahí nuestro compromiso diario de aplicar las medidas que resuelvan en todo lo posible las necesidades básicas de los ciudadanos.
Hasta hoy, hemos enfocado nuestro trabajo a pugnar por el establecimiento de programas dirigidos a quienes verdaderamente los requieren, ejemplo de ello es la Canasta Solidaria, programa que hasta la fecha cubre en mucho las necesidades básicas de las familias.
Hemos llevado esa práctica a todos los puntos posibles, e inclusive lo hemos extendido a domicilio a los adultos mayores y a personas con alguna discapacidad, porque ellos son también prioridad para su gobierno.
Con la instalación de las tortillería solidarias, se oferta a precio bajo este producto que no debe faltar en ningún hogar, y en el aspecto de la salud hemos llevado Médico en Tu Casa y contribuido de manera totalmente gratuita a preservar el bienestar de quienes enfrentan algún padecimiento, aunado además a la entrega de medicamentos.
Hemos dotado de uniformes escolares a las escuelas, sumándonos al esfuerzo que los padres de familia realizan por sacar avante sus hogares, y estamos ciertos que hemos podido en muchos casos, restar parte de esa preocupación a los jefes y jefas de familia.
Las cenas navideñas otorgadas por el municipio llevan también un solo objetivo, que nadie se quede sin disfrutar de un plato de alimento en nochebuena.
Un gobierno solidario, prioriza por encima de todo la plenitud de las personas, cuidando que lleven una vida digna en paz, con salud y con los insumos básicos asegurados, porque de eso no nos hemos preocupado, sino ocupado.
Así, de cara al nuevo libro que en unos días nos será entregado en blanco, estoy seguro que en el habremos de escribir cosas buenas que pasarán a la historia como un precedente bondadoso, humano y equitativo.
Por ahora, mi mejor deseo es que en estas fiestas, nos fundamos todos en un abrazo que nos recuerde el calor de hogar en estos días de festejo, pero también de reflexión y conciencia.
Que 2024 venga cargado de cosas buenas, de retos a cumplir con perseverancia y ahínco, pero sobre todo con salud plena para que los sueños se cumplan, obedeciendo así a lo que nos dicta el corazón.
¡FELICES FIESTAS!