En las recientes semanas han circulado en diversos medios de comunicación, así como redes sociales, notas y comentarios respecto a que en la comisión de Puntos Constitucionales ya se tienen los proyectos de dictamen de diversas reformas constitucionales, presentadas por el ejecutivo federal el pasado 5 de febrero del 2024.
Debo decir, que es información correcta, la comisión ya cuenta con esos dictámenes, incluso, durante la semana que concluyó, se discutieron al menos un par de ellos, acompañados de una discusión bastante prolongada y con muy valiosos argumentos de la oposición, no tendría que ser de otra manera, aún y cuando conocemos de antemano que, para morena ningún argumento es válido si este no proviene de la cabeza del señor que despacha desde Palacio Nacional.
A pesar de el avance en dichas reformas, las cuales se busca se aprueben en la legislatura que iniciará el 1 de septiembre, ya que la pretensión del partido oficialista, es que antes de concluir el mandato López Obrador, queden aprobados dichos dictámenes tanto en Cámara de Diputados, como en el Senado. Claro que al ser mayoría en la integración de las comisiones en ambas cámaras, tienen los votos para continuar sin ningún problema con estas reformas, es decir, en comisión no hay mayor problema.
Aquí lo verdaderamente interesante es, una vez que estos dictámenes lleguen al pleno en ambas cámaras, si las autoridades correspondientes no le conceden a morena la sobrerrepresentación, dichas reformas no pasarán; otro escenario distinto es que, si les conceden la sobrerrepresentación, sólo tendrán mayoría calificada en la Cámara de Diputados, no así en el Senado, incluso debo mencionarlo claramente, hoy con o sin pronunciamiento de dichas autoridades, morena y sus aliados no cuentan con la mayoría calificada en la Cámara Alta.
El mensaje de mi parte a la ciudadanía que está atenta a dichas reformas es, que no se callen y no sean meramente espectadores, dejando únicamente a los legisladores y partidos de oposición esta nueva batalla contra la naciente dictadura guinda; sin ninguna duda les digo, tienen los dictámenes, pero NO los votos, porque en el Senado, ni en esta, ni en la próxima legislatura tendrán los sufragios para una reforma constitucional, aquí la gran tarea de todas y todos es buscar a quienes integrarán el Senado, al menos, a los de oposición, y les hagamos marcaje personal, buscando evitar que los coaccionen, los amenacen o los compren a cambio de su voto.
Esta gran discusión en el Congreso de la Unión, se dará los primeros días de septiembre, y aprovechando que es el mes de la Patria, no permitamos que terminen con ella, que aniquilen, si así lo quieren ver, los incipientes avances democráticos que habíamos construido; no demos pie a que nos quiten las libertades que aún tenemos y por ende no extrañamos; ya lo decía el ex presidente de Chile, Sebastián Piñeira (+), quien en una de sus últimas entrevistas mencionó: “muchas veces cuando tenemos libertad y democracia no las defendemos, porque no las echamos de menos”. El país no acabó el 2 de junio, las batallas apenas comienzan, no bajemos la guardia y defendamos nuestra Patria. Seguimos México.