/ martes 7 de mayo de 2024

Para acompañar de un café / Intereses contra partidos

Este tema está por demás actual, aun sin olvidar que desde siempre el interés humano es el responsable de los cambios de la historia, pero hoy en día está más revuelto el río y los pescadores se están dando la gran vida a costa de todos los ciudadanos, y en un extremo de no decirles nada porque se ofenden, lo que es muy curioso, los ciudadanos ofendidos no deben ser escuchados y a ellos, si, lo que acarrea un distanciamiento con las bases sociales y más reducidos esos grupúsculos, dañinos y tristemente burlones de la problemática social, pero en lo real no en discursos, porque en ellos si los refieren, de palabra, solamente, los documentos no avalan eso.

La historia habla de partidos oficiales, y agrupaciones, pero que según sus principios defendían a las clases desprotegidas, lo que era hermoso, porque hoy en día son los que nos desprotegen, y aparte de que viven de los dineros del pueblo, me sorprende que tengan casas millonarias que ni los millonarios, ¿de dónde salió el dinero?, y nadie debemos opinar, y todavía siguiendo en rendirles como grandes personajes como si se les olvida de donde salieron y que gastaron el dinero que no era de ellos, y la ruina sigue fincando, ellos, también, porque aunque se reúnan entre ellos, son relegados por las mayorías, como que si se dan cuenta de las canalladas y hasta dan risa, pero es la realidad que vivimos, para la posteridad.

Esta costumbre se degeneró más a razón de que entre los que viven del poder, se genera una herencia desalmada de el mismo poder y grupúsculos, algo agresivos como plagas y dañinos en peor grado y el hecho de ser o pertenecer a estos montones supone grandeza, y es cierto, en montón son agresivos, de uno por uno, es otra historia muy diferente, porque se ha visto que casualmente a los que les llevan la contra, la muerte, y nadie dice nada, pero si se les toca, el aparato del Estado los protege porque nadie debe hacerse justicia por su mano, sólo ellos se adjudicaron ese derecho y las estadísticas no demuestran este hecho en particular, lo genérico, tapa según algunos las deficiencias que están a la vista.

Víctor Santini Reza / Doctor en Educación


Este tema está por demás actual, aun sin olvidar que desde siempre el interés humano es el responsable de los cambios de la historia, pero hoy en día está más revuelto el río y los pescadores se están dando la gran vida a costa de todos los ciudadanos, y en un extremo de no decirles nada porque se ofenden, lo que es muy curioso, los ciudadanos ofendidos no deben ser escuchados y a ellos, si, lo que acarrea un distanciamiento con las bases sociales y más reducidos esos grupúsculos, dañinos y tristemente burlones de la problemática social, pero en lo real no en discursos, porque en ellos si los refieren, de palabra, solamente, los documentos no avalan eso.

La historia habla de partidos oficiales, y agrupaciones, pero que según sus principios defendían a las clases desprotegidas, lo que era hermoso, porque hoy en día son los que nos desprotegen, y aparte de que viven de los dineros del pueblo, me sorprende que tengan casas millonarias que ni los millonarios, ¿de dónde salió el dinero?, y nadie debemos opinar, y todavía siguiendo en rendirles como grandes personajes como si se les olvida de donde salieron y que gastaron el dinero que no era de ellos, y la ruina sigue fincando, ellos, también, porque aunque se reúnan entre ellos, son relegados por las mayorías, como que si se dan cuenta de las canalladas y hasta dan risa, pero es la realidad que vivimos, para la posteridad.

Esta costumbre se degeneró más a razón de que entre los que viven del poder, se genera una herencia desalmada de el mismo poder y grupúsculos, algo agresivos como plagas y dañinos en peor grado y el hecho de ser o pertenecer a estos montones supone grandeza, y es cierto, en montón son agresivos, de uno por uno, es otra historia muy diferente, porque se ha visto que casualmente a los que les llevan la contra, la muerte, y nadie dice nada, pero si se les toca, el aparato del Estado los protege porque nadie debe hacerse justicia por su mano, sólo ellos se adjudicaron ese derecho y las estadísticas no demuestran este hecho en particular, lo genérico, tapa según algunos las deficiencias que están a la vista.

Víctor Santini Reza / Doctor en Educación