/ sábado 22 de junio de 2024

Entre voces / Reliquias de un Santo

Hace algunos días llegaron unas reliquias del Beato Carlo Acutis a nuestra ciudad. Fue asombrosa la respuesta de tanta gente que fue a recibirlas y acompañarlas hasta el templo de San Judas Tadeo. Quizá muchos se preguntaban ¿qué son esas reliquias? ¿Quién es Carlo Acutis? ¿Por qué tanto alboroto?

Desmenucemos un poco lo anterior. Beato es la persona fallecida que puede ser honrada a través de un culto una vez que el Papa haya certificado sus virtudes. La beatificación es uno de los pasos hacia la canonización: antes de ser considerado como santo, el individuo en cuestión es declarado primero siervo de Dios, luego venerable y en una tercera etapa, beato.

La diferencia entre un beato y un santo es la universalidad de su devoción. El beato, es solo de manera regional, para luego, si su devoción se extiende en más de un continente y se comprueban nuevos milagros por su intercesión, el Papa canoniza al beato, agregándolo al calendario de los santos.

Carlo Acutis, fue un joven nacido en Londres en 1991, de padres italianos, luego regresó a vivir a Italia donde creció su infancia y adolescencia. Siempre mostró un gran amor a Cristo Eucaristía y a la Virgen María. Era un chico normal, al que le gustaba jugar videojuegos, andar en bicicleta y pasear con sus amigos.

Utilizó el internet para promover los milagros eucarísticos del mundo entero. En 2006, cayó enfermo de una gripa, que reveló una leucemia grave, y a los pocos días falleció. Nunca mostró miedo ante la muerte, y siempre una fe grande. Decía que todos nacemos originales pero el mundo nos quiere hacer fotocopias. También con frecuencia decía a sus amigos que así como el sol broncea la piel, Jesús Eucaristía, irradia sus rayos de amor a quien lo adora, santificándolo.

Su corazón se encuentra en un relicario en la Basílica Papal de Asís, y su cuerpo en el templo del despojo, donde San Francisco de Asís se desnudó, para indicar que dejaba su vida anterior y fue arropado por el obispo. La devoción a Carlo Acutis se ha difundido de manera exponencial en todo el mundo en los eventos internacionales de la juventud y por la presencia de tantos peregrinos que invocan su intercesión, de manera especial jóvenes enfermos.

¿Y las reliquias? Existen grados de reliquias, que nos recuerdan la presencia de los santos. Las de primer grado son aquellas de su cuerpo y así sucesivamente. En la peregrinación que les platicaba, peregrina una parte del tejido de su corazón, y de su cuero cabelludo, cuando se realizó la exhumación. El corazón estaba incorrupto, por eso se conserva en la Iglesia de Asís. Aquí en Parral, gracias a la solicitud de los amigos de Carlo Acutis que hay en nuestra ciudad, y de nuestro obispo, se consiguió que una reliquia de primer grado (cabellos del beato) se queden en el lugar adecuado para su veneración en el Templo de San Judas Tadeo de la ciudad de Parral.

Los santos no hacen milagros, sino que ellos son nuestros intercesores y modelos a imitar. La Iglesia enseña la comunión de los santos, que se convierte en ayuda mutua para ser mejores cristianos todos. Los invito a conocer más la vida de Carlo Acutis, que próximamente será canonizado por el Papa Francisco. Consulten su página: carloacutis.com y aquella qué el mismo inició hace algunos años miracolieucaristici.org. Hay mucho material para conocer su vida, y muchos jóvenes que pueden seguir su ejemplo. Beato Carlo Acutis, ruega por nosotros.

Leonel Larios Medina / Sacerdote católico y licenciado en comunicación social

Hace algunos días llegaron unas reliquias del Beato Carlo Acutis a nuestra ciudad. Fue asombrosa la respuesta de tanta gente que fue a recibirlas y acompañarlas hasta el templo de San Judas Tadeo. Quizá muchos se preguntaban ¿qué son esas reliquias? ¿Quién es Carlo Acutis? ¿Por qué tanto alboroto?

Desmenucemos un poco lo anterior. Beato es la persona fallecida que puede ser honrada a través de un culto una vez que el Papa haya certificado sus virtudes. La beatificación es uno de los pasos hacia la canonización: antes de ser considerado como santo, el individuo en cuestión es declarado primero siervo de Dios, luego venerable y en una tercera etapa, beato.

La diferencia entre un beato y un santo es la universalidad de su devoción. El beato, es solo de manera regional, para luego, si su devoción se extiende en más de un continente y se comprueban nuevos milagros por su intercesión, el Papa canoniza al beato, agregándolo al calendario de los santos.

Carlo Acutis, fue un joven nacido en Londres en 1991, de padres italianos, luego regresó a vivir a Italia donde creció su infancia y adolescencia. Siempre mostró un gran amor a Cristo Eucaristía y a la Virgen María. Era un chico normal, al que le gustaba jugar videojuegos, andar en bicicleta y pasear con sus amigos.

Utilizó el internet para promover los milagros eucarísticos del mundo entero. En 2006, cayó enfermo de una gripa, que reveló una leucemia grave, y a los pocos días falleció. Nunca mostró miedo ante la muerte, y siempre una fe grande. Decía que todos nacemos originales pero el mundo nos quiere hacer fotocopias. También con frecuencia decía a sus amigos que así como el sol broncea la piel, Jesús Eucaristía, irradia sus rayos de amor a quien lo adora, santificándolo.

Su corazón se encuentra en un relicario en la Basílica Papal de Asís, y su cuerpo en el templo del despojo, donde San Francisco de Asís se desnudó, para indicar que dejaba su vida anterior y fue arropado por el obispo. La devoción a Carlo Acutis se ha difundido de manera exponencial en todo el mundo en los eventos internacionales de la juventud y por la presencia de tantos peregrinos que invocan su intercesión, de manera especial jóvenes enfermos.

¿Y las reliquias? Existen grados de reliquias, que nos recuerdan la presencia de los santos. Las de primer grado son aquellas de su cuerpo y así sucesivamente. En la peregrinación que les platicaba, peregrina una parte del tejido de su corazón, y de su cuero cabelludo, cuando se realizó la exhumación. El corazón estaba incorrupto, por eso se conserva en la Iglesia de Asís. Aquí en Parral, gracias a la solicitud de los amigos de Carlo Acutis que hay en nuestra ciudad, y de nuestro obispo, se consiguió que una reliquia de primer grado (cabellos del beato) se queden en el lugar adecuado para su veneración en el Templo de San Judas Tadeo de la ciudad de Parral.

Los santos no hacen milagros, sino que ellos son nuestros intercesores y modelos a imitar. La Iglesia enseña la comunión de los santos, que se convierte en ayuda mutua para ser mejores cristianos todos. Los invito a conocer más la vida de Carlo Acutis, que próximamente será canonizado por el Papa Francisco. Consulten su página: carloacutis.com y aquella qué el mismo inició hace algunos años miracolieucaristici.org. Hay mucho material para conocer su vida, y muchos jóvenes que pueden seguir su ejemplo. Beato Carlo Acutis, ruega por nosotros.

Leonel Larios Medina / Sacerdote católico y licenciado en comunicación social