/ miércoles 16 de octubre de 2024

Construir un Nuevo Trato es la única forma para que el Norte sobreviva

El federalismo está roto y esto no es una disertación política, es la voz de las familias chihuahuenses, es la voz de cada chihuahuense que ha visto al norte vivir en la orfandad, en el desprecio y en la injusticia.

El Pacto Federal es la relación entre la federación y los estados, la doctrina política que establece la división de poderes entre un gobierno central y los estados miembros. Nuestro federalismo estipula que la nación está compuesta por estados libres y soberanos en todo lo concerniente a su régimen interior, he aquí la primera violación sistemática al pacto.

La mal llamada reforma judicial nos deja una lección muy clara, para la federación no existe otra voz que el centro del país. A través de una reforma a todas luces ilegal, quieren imponer en Chihuahua un absurdo mecanismo para “elección” de jueces y magistrados, nos quieren decir, a un estado libre y soberano, cómo impartir justicia.

Este es el federalismo mexicano, el desprecio al norte como regla general. Para la federación la patria no cobija al norte, no existen las voces que disienten del centralismo, pero la verdad que debemos grabar en letras imborrables, es que el norte también es patria, somos los hijos del límite del país, somos las manos que manufacturan con la eminencia de la denominación de origen que dice "frontera norte".

Nuestro Norte Patria tiene décadas en el abandono, a nuestro Chihuahua le regresan migajas en el presupuesto, 39 centavos por cada peso que aquí producimos, 39 centavos que debemos administrar para los 67 municipios, 39 centavos que se traducen en un insulto a una tierra que produce y que genera, que aporta, como pocas, a la nación.

Nuestro Norte Patria padece la anemia para cubrir las necesidades de las familias chihuahuenses en materia de obra pública, en los cuatro pilares fundamentales: educación, infraestructura carretera, salud pública y seguridad.

Es por eso que desde el Norte hoy exigimos refundar el pacto federal, construir un Nuevo Trato para Chihuahua, donde se cumpla, de una vez por todas, con un trato justo en el que respete nuestra soberanía, fortalecer nuestras capacidades políticas, administrativas y permita un desarrollo pleno del norte.

Es imperativo se contemple una correspondencia entre la bonanza de capital económico que otorgan los chihuahuenses y la reciprocidad en materia de asignación de recursos. Esto es un Nuevo Trato para Chihuahua en materia presupuestal, que cambie el paradigma para que quien más produzca más reciba.

Hemos estado mucho tiempo en la más completa de las orfandades la del desinterés y desigualdad presupuestaria, pero no más, desde el Norte construimos un Nuevo Trato para reclamar nuestro espacio en la mesa de decisiones.

Un Nuevo Trato para Chihuahua, donde creemos en la democracia, la ley y la división de poderes; un Nuevo Trato para el dinero de los chihuahuenses, eternamente saqueados con impuestos; un Nuevo Trato para las familias, asoladas por la violencia y la injusticia, un Nuevo Trato por el campo chihuahuense, por quienes han hecho florecer al desierto ante toda adversidad.

Este es el momento de los chihuahuenses de bien, el momento en que no nos resignaremos a obedecer al régimen, porque si la federación nos vuelve a dar la espalda, los chihuahuenses estamos listos para dar la batalla contra el centralismo, contra quienes desprecian nuestra vida y valores, estamos listos y, sobre todo, somos capaces, de vivir en libertad.

La lucha por el fortalecimiento de nuestra autonomía no es solo una cuestión política, es una cuestión de supervivencia. Si seguimos así, corremos el riesgo de perder todo lo que hemos logrado y, más aún, de condenar a futuras generaciones a vivir en un estado de dependencia y precariedad. Un Nuevo Trato es recuperar nuestra grandeza y nuestra dignidad.


Maestría en Derecho, Diputado Local por Movimiento Ciudadano y Dirigente Estatal de Movimiento Ciudadano